Herrera, ex compañero de Campos, e histórico guardameta de azul, dejó ver su dolor por la delicada situación que atraviesa el futbolista tras su accidente.
El trágico accidente de Cristóbal Campos no dejó a nadie indiferente en el mundo del fútbol chileno. Movilizando tanto a clubes como a sus compañeros de profesión, que desde el día lunes 5 de septiembre, han estado muy atentos a la evolución del jugador.
Bajo ese escenario, una de las figuras que se había mantenido en silencio fue Johnny Herrera. Idolo, ex compañero y referente de Cristóbal Campos Véliz en todo el periodo formativo de este último en el “Romántico Viajero”.
Relación de la que Herrera siempre se ha mostrado orgulloso, siendo el primer y gran defensor del ex guardameta azul.
En esa línea, y claramente afectado, Johnny Herrera aprovechó su espacio como comentarista de TNT Sports para dar detalles de la situación médica del joven portero.
Subrayando que enterarse de la noticia: “fue muy terrible para todos los que lo conocemos”.
“Fue muy traumático, insisto, las noticias fueron rápidas y confusas en un principio. Por suerte, yo tengo un amigo que es médico, que es cirujano, entonces me puso al tanto de todo lo que había pasado”, agregó el samurai.
Recuperación paso a paso
Por otro lado, Herrera mostró su admiración por la fuerza y coraje de su ex compañero, asegurando que está al tanto de que: “ha ido evolucionando”.
“En un principio era muy drástico el diagnóstico y con el tiempo ha ido evolucionando, ha ido evolucionando bien. No sé sí hubo una cadena de oración, no sé, pero gracias a Dios le pudieron injertar su pie, punto por punto, para que su pie vuelva a irrigar sangre, por ejemplo, y no solamente lo pueda tener sino que también lo pueda sentir”.
“Eso es lo más complejo en este tipo de cosas. Obviamente no es mi opinión, es lo que me dicen los médicos. Pero, gracias a Dios ha ido evolucionando, está bien. Mañana espero verlo. No ha podido tener visitas salvo su familia”, apuntó el otrora seleccionado nacional.
Para finalmente, añadir: “de ahora en más, a rezar, hay que seguir. Con mi hijo hemos estado sentados de rodillas rezando para que saliera adelante”.
