Luego de cumplir con su cuarentena protocolar, el nuevo Gerente Deportivo Luis Roggiero, conversó con el canal oficial del club sobre su filosofía de trabajo y lo que significa para él llegar a un equipo como Universidad de Chile.
“Un agradecimiento enorme a la nueva administración del club por confiar mi persona y la capacidad que yo tenga para aportarle en este nuevo ciclo que inicia el club, hay un gran sentido de responsabilidad, también enriquecido por ese calor del domingo pasado en el estadio de su hinchada que me genera un compromiso tanto más grande”, dijo el ecuatoriano respecto a su presencia en el ultimo duelo de los azules.
En tanto a las negociaciones para su arribo, explicó que: “fue un gran honor recibir una llamada de un club de la trascendencia y de la relevancia que tiene la U. de Chile. Aun cuando en principio no me planteaba una salida, no me podía negar la oportunidad de escucharle a la U y poco a poco conforme teníamos conversaciones fuimos identificando una visión similar en cuanto a lo que entendemos por gestión deportiva y eso hizo que se fuera construyendo naturalmente una respuesta, un sí que al que a la larga me tiene hoy aquí ya siendo partícipe”.
“A partir de hoy inició un periodo intenso de aprendizaje con su gente y a través de su gente, porque para poder empezar a construir ese futuro que deseamos hay que empezar por saber dónde estamos saber qué oportunidades se presentan qué desafíos tiene el club y a partir de ahí sí poder empezar a dar primeros pasos. Hay algunas decisiones que se tienen que tomar con cierta premura y las iremos encarando también, pero para poder construir un proyecto sostenible hay que partir de un de un diagnóstico profundo del dónde está el club hoy por hoy”, reflexionó Roggiero.
El “genio matemático” dio luces sobre su labor dentro de la institución: “un gerente deportivo tiene como misión principal facilitar un entorno que le conduzca al club hacia el alto rendimiento que le permita ser cada vez más competitivo, que los jugadores puedan encontrar respuestas a los desafíos que les va planteando el juego, tanto desde el punto de vista técnico-táctico y también desde el punto de vista condicional mental. Eso se logra conformando un equipo de trabajo con un staff multidisciplinario e interdisciplinarios que pueda ir definiendo mejores prácticas para que al jugador le acerquen a ese a ese rendimiento óptimo”.
De igual forma, el licenciado en Economía dio su parecer respecto al equipo azul: “la U tiene de todo, menos excusas. Es un club muy fecundo para poder construir proyecto sostenible en el tiempo y que le permita al club estar en los sitiales que su historia lo exigen y que su gente lo merece.
Por otro lado, enfatizó la importancia del futbol formativo como base de su proyecto: “hay una sensibilidad por el fútbol joven que puede ser una base sobre la que construyamos. Hay que hacer ciertas experiencias y haber podido también identificar ciertos caminos que nos permitan poder ir acortando tiempos a ese futuro deseado. Los futbolistas jóvenes, en mi experiencia, han sido capaces de responder a los desafíos que se les plante y es importante a su vez darles herramientas, eso parte por nosotros. Las oportunidades y posibilidades que ellos tengan van a depender de lo que nosotros podamos ofrecerles”.
“Es importante que podamos definir una identidad de juegos, una idea de juego como club, unas señas de identidad que nos representen y que se las puedan ver en todos los equipos del club y a partir de ahí nos dará una base para tomar una serie de decisiones adicionales relacionadas por ejemplo a los perfiles de jugadores que queramos incorporar, como también vamos a intentar ayudarles a ellos a que desarrollen esa herramienta”, aseguró Luis Roggiero.
