El entrenador campeón en 2009 confesó problemas que tuvo con la dirigencia para permanecer sólo meses en el equipo azul.
Hay un técnico que tuvo un breve paso por la Universidad de Chile pero dejó un grato recuerdo en los hinchas, por el título del año 2009 y por una aceptable participación en la Copa Libertadores. Sergio Markarián nuevamente se acordó del club azul y su estadía, donde asegura que donde va siempre algún hincha lo entrega el cariño.
“Muchas veces me cruzo en algún aeropuerto o con gente de Chile que viene de vacaciones acá y tengo una nuera chilena. Siempre me cuentan del cariño que me tienen y, claro, también hay gente que no me quiere. Esto es así. Yo sé lo que hice en la U. de Chile. Yo sé que en la ‘U’ había una historia antes de mí y otra después de mí”, comentó Markarián en conversación con La Tercera.
“Yo llegué a un equipo que estaba bajo en la bolsa, que estaba fundido, donde no se querían los jugadores…. Querían echar a la mitad del equipo, que los dirigentes tenían lío con la hinchada, que la hinchada no quería a nadie, que no tenía poder político, que no salía campeón… Yo llegué en esas condiciones. Después dejé un equipo campeón, con un proyecto. Con jugadores que se vendieron en cifras millonarias, que permitieron un crecimiento institucional y deportivo como nunca había tenido en su historia. Hay que ver qué había antes y qué hubo después, agregó
“Entrenábamos en un parque cerca del Nacional, no éramos locales en ningún lado, jugábamos en ciudades del interior. Fue un mérito grande ser campeón en esas condiciones”, explicó el entrenador, complementó.
En ese sentido, contó el por qué su staff decidió dar un paso al costado a los meses de asumir el mando, pese a que se quedaron hasta levantar el título de campeón en una final ante Unión Española.
“Porque en el contrato de inicio de la tarea hubo cosas que no me gustaron y les dijimos a los dirigentes que, por más que firmáramos por un año, a los seis meses nos iríamos. Y así fue. Salí campeón y, como había prometido, me fui”, enfatizó Markarían.
En cuanto a los Superclásicos, donde dirigió en una derrota por 3-1 en el Nacional, siempre le recuerdan la frase cuando dijo que los jugadores estaban “extrañamente nervioso”, algo que se le pidió aclarar.
“No lo recuerdo. Debe haber sido una tontería que dije. Es posible que lo haya dicho y, absolutamente, justificable. (el domingo) Vimos un clásico en Argentina donde había un equipo que estaba nervioso. Los clásicos son partidos de mucho nervio, se juegan demasiadas cosas”, cerró.
