El otrora jugador y técnico rememoró detalles inéditos de la final.
Una linda jornada para la historia de la Universidad de Chile. Este 27 de junio se cumplen 16 años desde la obtención de la duodécima estrella del club, logrado ante Cobreloa en la altura de Calama. Aquel plantel se caracterizó por su carácter aguerrido, y el técnico de ese momento, Héctor Pinto, recordó la hazaña del apertura 2004.
“De esa final en Calama recuerdo dos hechos anecdóticos que fueron muy importantes: el primero, fue que cuando entramos al camarín previo al partido, encontramos un símbolo del ‘patito feo’ y a un costado estaba un cisne que es a lo que teníamos que llegar como equipo; eso fue acompañado de una charla. Lo segundo fue que cuando salimos a calentar, los jugadores de Cobreloa estaban entrenando con una polera que decía campeones, eso molestó a los muchachos y terminaron demostrando en la cancha” dijo en conversación con el sitio oficial de la ‘U’.
Consultado respecto a lo que caracterizó a su equipo, Pinto recalcó que: “Lo que llevó a la U a ser campeón, es que armamos un buen equipo de fútbol y un gran grupo humano. Funcionaron muy unidos dentro y fuera de la cancha. El cuerpo técnico impregnó a los jugadores que no tenían pasado azul, con todas las características que debe tener un jugador de la ‘U’. Fueron muy importantes Luis Musrri, Johnny Herrera y Diego Rivarola”.
“Nosotros fuimos considerados como el ‘patito feo’ del torneo. En ese momento nos juramentamos que ese ‘patito feo’ lo convertiríamos en el hermoso cisne del cuento” cerró.
